Medallón con la efigie de Gaspar Becerra incrustado en la fachada del Museo del Prado de Madrid |
Nació en Baeza (Jaén) en 1520, hijo del pintor Antón Becerra y de doña Leonor Castilla.
Se formó en Roma, en torno a Miguel Ángel y a los artistas romanos
seguidores de Rafael.
Trabajó a las ordenes de Giorgio Vasari, en la
decoración al fresco de la Sala del Cento Giorni del Palacio de la
Cancilleria de Roma (1545-1546), en colaboración con Pedro de Rubiales y
posteriormente (1550-1555) junto con Daniele
Volterra en la capilla Rovere en la iglesia de Santa Trinita dei Monti
de la misma ciudad, de la que se le atribuye la escena de la Natividad
de la Virgen.
El 15 de
julio de 1556, contrae matrimonio con Paula Velázquez.
Tras su regreso a
España, se instaló en Valladolid en 1557, y un año después es
contratado por el Cabildo para realizar el retablo mayor de la catedral
de Astorga en el que pueden admirarse sus dotes como escultor.
Retablo mayor de la catedral de Astorga |
El 26 de
noviembre de 1562 entra al servicio de Felipe II, realizó varias
decoraciones al fresco, técnica que dominaba, en el Alcázar donde llevo a
cabo escenas alegóricas de los Cuatro Elementos y de las Artes
Liberales, destruidas en el incendio del edificio en 1734.
La única obra
conservada de su producción en España son los frescos ejecutados hacia
1563, en el techo de una de las torres del palacio de El Pardo, en
Madrid, con las Hazañas de Perseo.
El triunfo de perseo |
El 23 de agosto de 1563
obtiene el título de pintor del rey.
Realizó el retablo del Monasterio
de las Descalzas Reales, por encargo de Juana de Portugal y trabajo en
el claustro de la Catedral de Toledo, donde pinto una Piedad, que no se
conserva, al igual que en el retablo que realizo para la iglesia de
Beceruelo (Valladolid).
Retablo del Monasterio de las Descalzas Reales, por encargo de Juana de Portugal |
Fue el principal representante de la influencia
del artista italiano Miguel Ángel en el renacimiento español.
Claustro Catedral de Toledo |
Como pintor destaca
por su acusado expresionismo, bien presente en la Natividad de la Virgen,
pintada para la iglesia de la Trinitá dei Monti en Roma entre 1550 y 1955.
Se
le considera autor de los dibujos de anatomía de un famoso tratado, el de Juan
de Valverde, publicado en Roma en 1556.
En la iglesia mayor de El Puerto de
Santa María se conserva una hermosa Soledad, encargada por la reina Isabel de
Valois.
El encargo de esta
talla se encomendó al reconocido pintor y escultor andaluz Gaspar Becerra,
quien talló hasta dos modelos de la imagen, que fueron rechazados por la reina
al no ajustarse a sus gustos. Gaspar Becerra se había retirado para tan
importante encargo al convento de los Mínimos de la Victoria y San Francisco de
Paula, en Madrid, en la Carrera de San Jerónimo, donde quedaron depositadas las
imágenes rechazadas.
Muchos años después,
en 1637, el inquisidor Gonzalo Fernández del Pozo, afincado en El Puerto de
Santa María, pidió la adquisición de una de estas dos imágenes de La Soledad
rechazadas para el convento de los Mínimos de la Victoria, donde algunos años
antes se había fundado la Hermandad de La Soledad; petición que le fue
concedida, enviando los Mínimos de Madrid hasta El Puerto esta talla de la
Virgen de la Soledad.
Hoy lleva su nombre la Escuela de Artes de su ciudad natal, donde se
conservan obras como La Piedad, un hermoso bajorrelieve de alabastro en el
museo de la catedral baezana.
Gaspar Becerra falleció en Madrid el 23 de enero de 1568.
ALGUNAS DE SUS OBRAS
Monasterio de las Descalzas Reales. Madrid. |
Palacio Real de El Pardo |
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